El sueño de Dios para tu vida
Ahora, mi deseo de niño y mi realidad presente son muy diferentes… De la misma manera, hoy día podemos tener sueños que son “buenos” pero que no son necesariamente la voluntad de nuestro Padre Celestial para nuestras vidas.
Mucho antes de tu nacimiento, tu Creador tenía sueños para ti…
Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica. (Efesios 2:10)
¡Maravilloso, tú eres su obra maestra… su poema de amor!
Oración, no desesperación
Cuando te encuentres en una situación imposible, tu talento, lógica y educación no resolverán tu problema. Sólo Dios puede. Dios puede guiarnos a lo porvenir, gracias a la comunión que tenemos con él por medio de la oración. La oración trae paz a tu alma, consuelo a tu corazón, esperanza para el futuro. Cuando oras, Dios se responsabiliza de tu situación. Por consiguiente, puedes estar agradecido, no inquieto. Te animo a que encuentres una promesa en la Biblia que se adapte a tu problema o situación y construye una oración al respecto. Confía en Dios, espera en Él. Él es fiel, y sobre todo, no te desesperes por nada. Jeremías 33:3/Mateo 7:7-8.
¡Gracias por existir!
Nunca estás solo, Dios está contigo.
Te has preguntado ¿dónde está Dios? Cuando te sientes solo o vives momentos difíciles.
Esta donde siempre ha estado: a tu lado. Él está contigo incluso si no lo sientes. La Biblia dice una y otra vez que si tienes una relación con Cristo, entonces Dios está contigo todo el tiempo. Él dice: “Yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo” (Mateo 28: 20b NVI). Él siempre está contigo. Nunca estás completamente solo. Para los creyentes, es una promesa a la que podemos aferrarnos en nuestros tiempos de miedo y soledad. No solo es un consuelo, sino que también nos brinda la oportunidad de conocer mejor a Dios.
¡Gracias por existir!
El poder que transforma el mundo
En el Padrenuestro (Mateo 6:10), cuando Jesús enseña acerca de la oración, dice: “Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo” , ¡Esto significa que la voluntad de Dios en la tierra debe cumplirse perfectamente… como ya está en el cielo! Pero con demasiada frecuencia encontramos que la voluntad de Dios no es necesariamente la prioridad para muchas personas sobre la tierra.…¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo! Todo esto proviene de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dio el ministerio de la reconciliación: esto es, que en Cristo, Dios estaba reconciliando al mundo consigo mismo, no tomándole en cuenta sus pecados y encargándonos a nosotros el mensaje de la reconciliación. Así que somos embajadores de Cristo. 2 Corintios 5:17-20
El poder que transforma el mundo
En el Padrenuestro (Mateo 6:10), cuando Jesús enseña acerca de la oración, dice: “Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo” , ¡Esto significa que la voluntad de Dios en la tierra debe cumplirse perfectamente… como ya está en el cielo! Pero con demasiada frecuencia encontramos que la voluntad de Dios no es necesariamente la prioridad para muchas personas sobre la tierra.…¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo! Todo esto proviene de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dio el ministerio de la reconciliación: esto es, que en Cristo, Dios estaba reconciliando al mundo consigo mismo, no tomándole en cuenta sus pecados y encargándonos a nosotros el mensaje de la reconciliación. Así que somos embajadores de Cristo. 2 Corintios 5:17-20
Una canción de restauración
¿Cómo hablar de perdón sin mencionar las cicatrices?
Perdonar no hace desaparecer el mal que se ha cometido.
El perdón no borra la herida, pero puede cerrarla mediante un proceso de curación… que puede dejar cicatrices
Entonces…
En este día, me gustaría compartir con ustedes las palabras de una canción que refleja maravillosamente el proceso de restauración que Dios desea operar en cada vida…
“Estas cicatrices no son hermosas, pero son parte de mí y no quiero ocultarlas”.
Te he dicho que si crees
“Al pasar Jesús, vio a un hombre ciego de nacimiento…” La Biblia Juan 9:1.
En la vida hay algunas cosas que no podemos controlar y de las que no somos responsables…Al igual que este hombre ciego de nacimiento, podemos nacer con una enfermedad o vernos de repente enfrentados con diversos problemas que tampoco provocamos.
Los discípulos de Jesús buscaron una causa para justificar el estado de ceguera de este hombre. Por lo que le hicieron una pregunta a Jesús: Rabí, ¿quién pecó, éste o sus padres, para que naciera ciego? Juan 9:2
La respuesta del Señor fue inmediata y contundente, estaba claro que se encontraban en un error de perspectiva: ” Ni éste pecó, ni sus padres; sino que está ciego para que las obras de Dios se manifiesten en él.” Juan 9:3
Reunirse en familia, ¿será que pasó de moda?
En el mundo postmoderno y acelerado de nuestros tiempos, donde cada miembro de familia vive su vida alrededor de múltiples ocupaciones, compromisos sociales y falta de tiempo, muchas personas ven pasar las horas, los días, las semanas y hasta los meses, sin encontrar espacio en sus saturadas agendas para reunirse con los demás miembros de su propia familia.
“la falta de tiempo, las distracciones excesivas, las múltiples ocupaciones y el cansancio, son factores que afectan a los miembros de las familias, que impiden que se reúnan periódicamente con el fin de compartir en familia”.